La ampolla de sangre del santo incrustada en el relicario empezó a ser adorada de 16:00 a 21:00. Largas fueron las filas de devotos que participaron de este primer día de exposición de esta reliquia de primer grado, es decir, parte del cuerpo del primer Papa que visitó Paraguay en 1988.

‘‘Es un momento muy importante para el país porque viene Juan Pablo II a estar otra vez con nosotros por medio de esta reliquia. Sabemos que su intercesión siempre es muy poderosa’’, comentó Carla Bogarín, miembro del movimiento Apóstoles de los Dos Corazones, que hizo posible esta veneración.

Con pañuelos y rosarios en mano, los fieles se acercaron a la reliquia y dieron intenciones por la salud de algún familiar enfermo, problemas económicos o en busca de paz y sosiego ante las difíciles circunstancias que se presentan en la vida de uno.

En 2017, esta reliquia estuvo por Paraguay en el marco de una peregrinación mundial y cinco años después las mismas personas que pidieron un milagro hoy dieron testimonio de los mismos. ‘‘Una cosa es contar y otra lo que se vive frente a San Juan Pablo II’’, indicó Bogarín.

La reliquia llegó al país con la madre Adela Galindo, fundadora de las Siervas de los Corazones Traspasados de Jesús y María, quien la tiene bajo su custodia para la peregrinación por los Estados Unidos. Como ahora la institución religiosa abre un convento en Paraguay, se aprovechó el tiempo libre para exhibirse en las diócesis locales.

Aparte de la Catedral Metropolitana, los católicos podrán venerar la sangre de San Juan Pablo II mañana 10 de agosto en la Basílica Nuestra Señora de Caacupé, de 16:00 a 21:00. En el marco del novenario de la Virgen de la Asunción, la reliquia volverá a estar exhibida en la Catedral de 16:00 a 21:00 el viernes 12.

FUENTE: UH