Cabe recordar que Ferreira había sido beneficiado previamente con arresto domiciliario por el Juez de Feria Miguel López, pero esta decisión fue posteriormente anulada por un tribunal de apelaciones.

Cuando la Policía Nacional se presentó en su domicilio para llevar a cabo una audiencia de medidas de manera telemática, se descubrió que Ferreira ya no se encontraba en su residencia. Ante esta situación, se emitió una orden de captura en su contra.

Por orden judicial, Ferreira deberá permanecer recluido en la Comisaría Primera de Encarnación. Una vez finalizado el proceso administrativo correspondiente, será trasladado al Centro de Rehabilitación Social de Itapúa.

Este nuevo desarrollo en el caso ha generado expectativas en la comunidad de Capitán Miranda y en los familiares de las víctimas. Se espera que el proceso judicial avance de manera justa y se esclarezcan los hechos relacionados con la muerte de los jóvenes.

La comunidad local espera que se haga justicia y que este caso sirva como un precedente para prevenir y combatir la violencia en la zona. Las autoridades instan a la población a colaborar con cualquier información que pueda ser útil para esclarecer los hechos y llevar a los responsables ante la justicia.