El Juzgado Penal de Garantías N° 1, a cargo de la Magistrada Melissa Carlson, ha decidido otorgar medidas sustitutivas al imputado Edison Alberto Herrera Muñoz en el caso de extorsión que se investiga en Encarnación.



En el marco de la investigación por los delitos de coacción grave, extorsión, usura y asociación criminal en Encarnación, la abogada Liza Sánchez, defensora del imputado Edison Alberto Herrera Muñoz, ha presentado una solicitud de revisión de la medida cautelar de prisión preventiva.


El Juzgado Penal de Garantías N° 1 ha concluido la revisión de la medida cautelar y ha resuelto otorgar medidas sustitutivas a la prisión. Estas medidas incluyen el arresto domiciliario en el domicilio de la concubina del imputado, Fabiana Benítez Rodríguez, ubicado en el Barrio Pacu-Cua de Encarnación. Además, se prohíbe al imputado reunirse con personas que pudieran incitar a cometer delitos, portar armas de cualquier tipo y ejercer violencia contra cualquier persona. Se establece una fianza real sobre un inmueble y una fianza personal de la concubina del imputado. Se advierte que en caso de incumplimiento de las medidas, se revocará la suspensión de la ejecución de la prisión preventiva y podrán serle impuestas medidas cautelares personales al imputado.


La Magistrada también ha ordenado la constitución de la Comisaría Segunda del Barrio Buena Vista para verificar el cumplimiento del arresto domiciliario, así como el traslado del imputado bajo custodia hasta su domicilio. Se establece un control aleatorio por parte de la dependencia policial y se señala una audiencia para que el imputado comparezca ante el Juzgado.


Este caso pone de manifiesto una vez más los "beneficios" que la Justicia otorga a presuntos delincuentes de aparente peligrosidad. Cabe destacar que el imputado fue detenido junto con otras tres personas de nacionalidad colombiana en el marco del operativo Gota a Gota, llevado a cabo semanas atrás.


Según las autoridades, esta organización criminal se dedicaba a otorgar préstamos informales bajo la modalidad "gota a gota", cobrando pequeñas cantidades diarias para cubrir la deuda contraída. En caso de impago, recurrían a amenazas para presionar a los clientes. Durante el operativo, se incautaron diversas evidencias, como teléfonos celulares, una memoria externa, un cuaderno con anotaciones, dinero en efectivo, tarjetas comerciales, así como tres motocicletas y documentos varios.