La Cámara de Diputados aprobó en general el proyecto de ley Hambre Cero a pesar de los cuestionamientos de los sectores médicos por centralizar los fondos y eliminar el desayuno y merienda escolar.


Con 49 votos, mayoría de diputados cartistas, la Cámara Baja aprobó en general el proyecto de ley Hambre Cero. Ahora pasarán a analizar cada uno de los artículos.


Durante el uso de la palabra, el diputado Antonio Buzarquis (PLRA) sostuvo que el foco del cuestionado proyecto no es el derecho de los niños y niñas a acceder a la alimentación escolar, sino más bien una “pelea por plata”.


“Estuve pensando en la palabra Hambre Cero y acá lo que hay es hambre de poder, hambre de dinero, porque nuestra discusión parece una pelea por plata y queda en segundo plano el derecho de los niños y esa es la imagen que estamos trasladando a la ciudadanía”, reprochó.



Igualmente, dejó por sentado su postura a favor de la aprobación de la ley, pero con modificaciones y sin que queden fuera Central y Presidente Hayes.


“Tenemos que trabajar juntos para construir un país diferente”, prosiguió.


A su turno, Dalia Estigarribia (PLRA) sostuvo que le hubiese gustado la postergación de este proyecto porque faltó tiempo para su estudio y presenta “varias inconsistencias claras e injustas”.


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Del otro lado, su colega Alejandro Aguilera (ANR) catalogó al proyecto “de revolucionario” y “que va a cambiar para siempre” el sistema educativo del Paraguay”.


“Este proyecto de ley no tiene color, no mira partidos políticos. Mi apoyo total a este proyecto que va a beneficiar a los niños”, aseguró.


En la misma línea, Derlis Rodríguez (ANR) resaltó que Hambre Cero “va a cambiar la historia del país” y felicitó al Poder Ejecutivo.


“Pongámonos los pantalones para que podamos aprobar el proyecto”, alentó a sus colegas.


Igualmente, indicó que quién “maneje los recursos va a seguir siendo una gran preocupación”, “porque la corrupción y la impunidad van a seguir siendo los canceres de este país”.


“Si vamos a tener miedo de que se coma la plata vamos a quedarnos todos en nuestras casas y si seguimos suponiendo de que esto puede ser un gran fracaso vamos a seguir escondiéndonos de los problemas del país”, se explayó.


Siguiendo con el debate, Adrián Dario Vaesken (PLRA) expresó su preocupación y alegó que el proyecto de ley discrimina y excluye.


“Me sumo a la propuesta de rechazar este proyecto de ley por excluir el desayuno y a dos gobernaciones”, sostuvo.


El parlamentario liberal Pastor Vera Bejarano calificó a la iniciativa del Ejecutivo de ser “un proyecto que viene como un intento de paliar el grave problema de desigualdad”.


Así fue el debate

El debate inició con las palabras de la diputada Cristina Villalba (ANR-Canindeyú), presidente de la Comisión de Presupuesto, leyó el dictamen a favor de la aprobación con modificaciones “este proyecto que tiene como objetico garantizar el almuerzo escolar”.


En su lectura del dictamen sostuvo que “la historia nos va a dar la razón porque nuestros niños bien alimentados van a tener mejor formación”.


Destacó la creación de Fonae, que será financiando con el 80% del Fonacide, unos USD 240 millones, y del Conae “como instancia que se encargará de controlar la ejecución de los recursos”.


Agregó que la recomendación en modificar el artículo 9, sobre el Arancel Cero, para que sea financiado con fondo 10; en decir, con dinero del Tesoro paraguayo.


A su turno, su colega Hugo Meza (ANR-Cordillera) se jactó al mencionar que el proyecto se debatió ampliamente y envió “tranquilidad” a los universitarios al asegurar que el Arancel Cero va a continuar con financiación.


Pidió, a su vez, que el 20% de los recursos destinados a infraestructura sean destinados a dos construcciones puntuales: baños y cocina-comedor.


Los colorados no pusieron cuestionamientos y sostenía que era el “buque insignia” del Gobierno de Santiago Peña, además trataron de “antipatriotas” a los colegas de la oposición.


Mientras que la oposición cuestionó la falta de respuestas a varias preguntas, como la exclusión del Ministerio de Salud dentro del Conae, donde estará la ONG Opaci.


Raúl Benítez fue uno de los más críticos del proyecto, al igual que Rocío Vallejo, Johana Ortega, Alexandra Zena y Guillermo Rodríguez.


Benítez, incluso, sostuvo, “que este proyecto está diseñado para ser un gran negocio”.



FUENTE: UH