En el último informe publicado por la Dirección de Vigilancia de la Salud, se registró un descenso del 20 % en las consultas por cuadros respiratorios en comparación con la semana anterior.


Las concurrencias a los centros asistenciales por enfermedades tipo influenza (ETI), pasó de 35.522 en la semana 23 a 29.672 en la semana 24. A pesar de esta disminución, es importante resaltar que la curva de tendencia aún se encuentra levemente por encima del umbral de alerta, lo que indica que la situación no ha vuelto a la normalidad, indica la dependencia.


Además, se observó un descenso del 19% en el número de hospitalizaciones en los centros centinelas en comparación con la semana anterior. Durante la semana 24, se registraron 415 internaciones por infecciones respiratorias agudas graves (IRAG), siendo el 72,5% de ellas en pacientes pediátricos. Del total de hospitalizados, el 70% corresponde a niños menores de 2 años, mientras que el 27,5% se reportó en adultos.


Es importante destacar que persiste el predominio de hospitalizaciones por infecciones respiratorias asociadas al virus sincitial respiratorio (VSR), con un total de 797 internaciones hasta la semana 24. El 93% de las hospitalizaciones relacionadas con este virus se disparó en pacientes pediátricos, especialmente en niños menores de 2 años (83%).


En cuanto a los casos de Influenza A, se ha observado un aumento en los hospitalizados, principalmente en los extremos de la vida: niños menores de 2 años y adultos mayores de 60 años. Es necesario tomar precauciones adicionales para evitar la propagación de estas enfermedades respiratorias.


Ante esta situación, se recomienda encarecidamente la vacunación contra la influenza y la COVID-19 para prevenir la aparición de formas graves de estas enfermedades y reducir el riesgo de hospitalización y muerte. También se insta a la población a usar mascarilla en caso de presentar síntomas y al acudir a los establecimientos de salud, así como a practicar el lavado de manos frecuente y garantizar la ventilación adecuada en los espacios cerrados.


Además, es fundamental seguir la etiqueta de la tos, cubriéndose la boca y la nariz con el pliegue interno del codo al toser o estornudar, y evitar el contacto cercano con personas que presentan síntomas respiratorios. Se deben evitar gestos de saludo como dar la mano o besos, así como compartir cubiertos, vasos o mate.


Fuente: ADN