Durante dos días, del 7 al 8 de diciembre, más de un centenar de voluntarios colaboraron en el santuario de Itacuá para la organización de las festividades marianas. El presidente de la comisión de apoyo, Miki Rosner, agradeció el apoyo de diversas instituciones, tanto gubernamentales como privadas, que contribuyeron a hacer posible este evento tras tres años de pandemia.

Rosner destacó la participación de la gobernación, la municipalidad y la séptima región sanitaria, así como de otras instituciones privadas, en la organización de las festividades. Este año representaba un desafío especial, ya que marcaba el regreso a la normalidad después de la pandemia. El presidente de la comisión expresó su gratitud a todos los católicos que acudieron al santuario de Itacuá, donde el clima fue favorable y se pudo disfrutar de un día maravilloso el 8 de diciembre.

La asistencia masiva en el santuario de Itacuá durante las festividades marianas refleja la devoción y el fervor de los católicos, así como la importancia de este evento para la comunidad. A pesar de los desafíos que ha enfrentado la sociedad en los últimos años, la celebración de esta fecha especial ha sido un motivo de alegría y esperanza para todos los presentes.