Cientos de fieles acudieron en la madrugada de este lunes 8 de diciembre al Santuario de Itacuá para honrar a la Virgen, en una jornada marcada por la lluvia y el viento que no lograron detener la profunda devoción de los peregrinos. Desde distintas localidades como Jesús, Bella Vista, Capitán Meza, Cambyretá y varias comunidades de Itapúa, los devotos llegaron para participar de las celebraciones religiosas, agradecer favores recibidos y renovar antiguas promesas.

Muchos iniciaron su caminata durante la noche, avanzando bajo la persistente inestabilidad climática. Según manifestaron, enfrentar estas condiciones forma parte del compromiso espiritual que asumen año tras año. A lo largo del trayecto, se escucharon testimonios de fe y gratitud de personas que aseguran haber recibido protección o experiencias consideradas milagrosas por intercesión de la Virgen de Itacuá.

Entre las historias que marcaron la jornada destacó la presencia de una familia de Cambyretá que, por segundo año consecutivo, instaló un puesto para ofrecer chipas de manera gratuita a los peregrinos. Según contaron, esta iniciativa es una forma de agradecer las bendiciones recibidas y de acompañar a quienes realizan el sacrificio de caminar hasta el santuario.

A pesar de las inclemencias del tiempo, las actividades religiosas se desarrollaron con total normalidad. Los fieles participaron de misas, cantos y momentos de oración, manteniendo viva una tradición profundamente arraigada que cada 8 de diciembre convoca a miles de personas. El fervor demostrado una vez más confirma la importancia de esta festividad, que continúa siendo uno de los encuentros religiosos más significativos de la región.