Las cifras del fabricante con sede en Aichi (centro de Japón) incluyen las de sus subsidiarias de minivehículos y camiones Daihatsu y Hino, y mantendrían a Toyota como líder mundial del sector por volumen de ventas por segundo año consecutivo.


Del volumen total de ventas, unos 8,3 millones de unidades fueron comercializados fuera de Japón, y 2,1 millones en el mercado doméstico, según Toyota.

El fabricante nipón, cuya producción se ha visto afectada por la carestía global de semiconductores y por el impacto de la pandemia en la cadena de suministros, señaló asimismo que sus perspectivas sobre ambos frentes siguen siendo «inciertas», en un comunicado.

«Continuaremos haciendo esfuerzos para minimizar el impacto», señaló Toyota, que la semana pasada se vio obligada a suspender temporalmente las operaciones en 11 de sus plantas en Japón debido al empeoramiento de la situación del covid en Japón.

Solo el pasado mes de diciembre, las ventas del fabricante nipón retrocedieron un 5,5 interanual debido «a los continuados efectos de la falta de autopartes derivada de la expansión de la covid-19 en el Sudeste asiático y por suministros insuficientes de semiconductores», según Toyota. 

Fuente: EFE