Un tenso ambiente se vive en la Cámara de Diputados que intenta sesionar para designar a una nueva mesa directiva.


. La sesión fue convocada por el presidente Pedro Alliana, pero el mismo decidió desconvocarla como una maniobra para no quedarse sin la titularidad.


En medio de gritos e improperios la Cámara de Diputados intenta llevar adelante la sesión extraordinaria en la que se pretende designar una nueva mesa directiva.

El oficialismo, algunos liberales y bandadas de representación minoritaria esperan iniciar la sesión. Varios legisladores denunciaron que los cartistas retuvieron al secretario general de modo a impedir el inicio de la sesión.


El diputado cartista Bachi Núñez, ingresó a la sala de sesiones en medio de gritos y aseguró a sus colegas que la sesión no se podría realizar debido a que no hubo el cuórum.

El legislador colorado se tomó a los gritos con Sebastián Villarejo, a quien trató de vendido. Por su parte, Villarejo aseguró que lo denunciará. Ambos casi se tomaron a los golpes.

Tras varios minutos de incidentes, el presidente de la Cámara de Diputados, Pedro Alliana y los demás cartistas ingresaron a la sala de sesiones y se retomó el griterío. Los cartitas tenían la clara intención de que se suspenda la sesión extra.


Los colorados cartistas quieren impedir la sesión de modo a ganar tiempo para seguir las negociaciones para quedarse por un periodo más con la mesa directiva de la Cámara de Diputados.


La intención de adelantar la sesión para la elección de la mesa directiva partió del propio cartismo. No obstante, ante la falta de votos para quedarse con la mesa directiva, decidieron desconvocar la misma.



Fuente: UH