Tras una fotografía viral en redes sociales donde se observaba aparentemente un ataúd depositado en un pozo artesiano del camposanto de Encarnación, un trabajador del lugar dio su versión.



Carlos Ramírez, alegó primeramente que el pozo ya no contaba con agua por lo que se decidió utilizarla para juntar escombros y otros tipos de residuos del lugar, por lo que lo que parecía un féretro en realidad fue la chapa de un ataúd, es decir, el resto del objeto. 


Este hecho ocurrió en el cementerio ubicado sobre la avenida General Bernardino Caballero y Dr. Juan León Mallorquín, en el casco céntrico de la ciudad.


Alegó que existen además otras personas que se dedican al trabajo de albañilería y traslados de fúnebres, por lo que se investigará el hecho para dar con el o los responsables.

La fotografía se hizo viral en las redes sociales y causó una gran indignación en la ciudadanía.