La magistrada Rosarito Montanía rechazó el pedido de revisión de la medida cautelar presentado por la defensa de Gianina García Troche y resolvió mantener su reclusión preventiva en la penitenciaría militar de Viñas Cué.


García Troche, vinculada sentimentalmente al narcotraficante uruguayo Sebastián Marset, está imputada dentro del proceso conocido como operativo A Ultranza. En su resolución, la jueza dispuso que la acusada continúe privada de libertad bajo un régimen de detención diferenciado.


La solicitud fue presentada por sus abogados defensores, Hugo Núñez y Daniel Garcete, quienes plantearon la liberación de su clienta por vía de la resolución ficta, argumentando que el juzgado no se había expedido en tiempo sobre un incidente previo de revocatoria de prisión preventiva, promovido en septiembre del año pasado.


En cuanto a su régimen de visitas, la procesada tiene autorizado el ingreso de familiares los martes, jueves y sábados en el horario de 9:30 a 11:30. No obstante, desde el mes de julio se amplió el horario de los sábados hasta las 14:00, con el objetivo de facilitar el contacto con sus hijos.


Asimismo, la interna cuenta con acceso controlado a un teléfono celular provisto por la administración penitenciaria, destinado exclusivamente a la comunicación con sus abogados y familiares previamente acreditados ante el juzgado. Cada llamada debe ser registrada, consignando fecha, hora, número telefónico, nombre completo del interlocutor y el vínculo que mantiene con la usuaria.


Las comunicaciones tienen una duración máxima de 20 minutos y solo pueden realizarse los días lunes, miércoles y viernes, entre las 9:30 y las 11:30. El horario de almuerzo está establecido para las 12:00.


El control diario de ingreso a la celda se realiza todos los días a las 17:00, momento en el cual también se le entrega la cena. La última verificación del día está programada para las 20:00.


Fuente: ADN