Las autoridades refuerzan controles para preservar las especies ictícolas durante su periodo de reproducción


Desde este 2 de noviembre entró en vigencia la veda pesquera en todo el territorio nacional y en las aguas compartidas con la República Argentina, medida que busca proteger el periodo de reproducción de las especies y garantizar la sostenibilidad de los recursos acuáticos. La disposición se aplica anualmente durante esta época con el fin de permitir que los peces completen su ciclo biológico sin la presión de la pesca comercial y deportiva.


Juan Leiva, encargado regional de la oficina del Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (MADES), informó que la veda se extenderá hasta el 20 de diciembre. “En nuestra región abarca desde Mayor Otaño hasta Ayolas, incluyendo ríos internos como el Tebicuary y la zona de Yuty”, detalló.


Actualmente, se encuentran registrados unos 759 pescadores comerciales en la oficina regional, quienes ya fueron notificados sobre la normativa. Leiva instó a la ciudadanía a colaborar respetando la prohibición, especialmente evitando la pesca desde las costas y el uso de herramientas como espineles, redes o boyas.


Durante el periodo de restricción, el MADES realizará controles conjuntos con la Prefectura Naval y otras instituciones para combatir la pesca ilegal. Los infractores se exponen a sanciones administrativas, multas y al decomiso de embarcaciones, equipos y productos transportados de manera irregular.


El representante del MADES recordó que esta medida es clave para la conservación de la fauna ictícola y para asegurar que las futuras generaciones puedan seguir aprovechando los recursos naturales de forma sostenible. Asimismo, señaló que el cumplimiento ciudadano es fundamental para que los resultados del periodo de reproducción sean favorables y se mantenga el equilibrio ecológico en los principales cauces hídricos del país.