Encarnación vivió este domingo una jornada histórica al albergar con éxito el IRONMAN 70.3, una de las competencias más prestigiosas del calendario mundial de triatlón. Casi 700 atletas de diferentes países llegaron hasta la capital de Itapúa para desafiar sus límites en un circuito exigente y a la vez cautivador.

El recorrido incluyó 1,9 km de natación en las aguas del río Paraná, 90 km de ciclismo a gran velocidad y 21,1 km de carrera a pie en un trayecto llano con vistas privilegiadas al río.

La energía del público, sumada a la hospitalidad encarnacena y a la belleza del circuito ribereño, convirtieron al evento en una verdadera fiesta del deporte. Muchos competidores coincidieron en describir la experiencia como un “viaje transformador”, que no solo puso a prueba su resistencia física, sino también su fortaleza mental.

La masiva convocatoria y el impecable desarrollo de la prueba reafirman a Encarnación como un destino de referencia en el triatlón internacional y marcan un hito en la historia deportiva del Paraguay.