La ola de inseguridad que se vive en la zona de la UNI ha afectado principalmente a los estudiantes, quienes han sido víctimas de hurtos y otros delitos. Ante esta situación, un grupo de jóvenes pertenecientes a esta casa de estudios se reunieron con autoridades en la Junta Municipal de Encarnación para buscar soluciones.

Durante la reunión, los representantes de la Federación de Estudiantes expusieron una serie de situaciones que favorecen a los delincuentes, como la falta de iluminación, patios baldíos y la poca presencia de uniformados. Además, denunciaron que ya son 7 las denuncias que duermen en los escritorios de fiscales y no avanzan. El objetivo es reducir la cantidad de hechos que se registran y capturar a los autores.

  Se espera que se tomen medidas concretas para mejorar la seguridad y reducir la cantidad de robos y delitos que afectan a la comunidad estudiantil.