Amigos Solidarios realizaron una emotiva acción en el Día Mundial de la Prevención del Suicidio, recordando la importancia de la empatía y la fe.


Encarnación vivió días de sensibilidad y esperanza con motivo del Día Mundial de la Prevención del Suicidio, conmemorado el 10 de septiembre. Un grupo denominado “Amigos Solidarios” llevó a cabo una iniciativa sencilla pero profundamente significativa: regalar abrazos y compartir frases bíblicas en la Costanera de la ciudad.


El gesto buscó transmitir aliento y fe en medio de una problemática que afecta silenciosamente a numerosas familias en Paraguay. “Un abrazo puede cambiar un día, una palabra de aliento puede dar fuerzas a alguien que lo necesita”, expresó Sady Ramos, integrante del grupo.


La reacción de los transeúntes fue inmediata y conmovedora: algunos respondieron con sonrisas, otros con palabras de gratitud, e incluso hubo quienes no pudieron contener las lágrimas. El impacto de la acción trascendió el momento, instalando un mensaje claro: hablar del suicidio, tender la mano y acompañar a quienes atraviesan dificultades puede salvar vidas.


El Día Mundial de la Prevención del Suicidio recuerda cada año que la vida siempre merece una oportunidad más, y que gestos como la empatía, la escucha activa y la compañía tienen un valor incalculable en la lucha contra esta problemática.


En Encarnación, estos Amigos Solidarios demostraron que no siempre se necesitan grandes recursos para llevar esperanza. A veces, basta con abrir los brazos y el corazón para recordar que nadie está solo en sus batallas.