Malandro Magno pidió disculpas por sus dichos por la comida paraguaya, pero apuntó que no tiene sazón.


El tiktoker colombiano Malandro Magno, quien dijo “que lo único bueno del país es el lomito árabe”, salió a dar la cara por sus declaraciones. El influencer cafetero, a raíz de sus polémicos comentarios, posteó un video pidiendo “disculpas” al pueblo paraguayo, clip que publicó este martes último; a pesar de esto indicó que la comida no tiene sazón. 

Esto es un mensaje para Paraguay, primero, me encanta su país, me encanta su gente, me encanta su cultura, yo subí videos de las 5 mejores comidas y las 5 peores comidas que yo probé en Paraguay, este tipo de videos yo siempre los hago, en cada país que visito, Perú, Bolivia, Ecuador, Colombia”, explicó Magno.

El influencer cafetero indicó que gracias a sus opiniones sobre la gastronomía local, todo el Paraguay lo “funó” (canceló). El joven aclaró que no solo “el lomito árabe” le gustó en su visita en el país. “Esto es mentira, tú puedes ver mis videos, donde yo probé comida típica paraguaya como el vorí vorí, chipa guazú, la sopa paraguaya y otras cosas que probé que me encantaron”, manifestó el tiktoker colombiano.

Así también, señaló que degustó comida que no le gustó y que nada puede hacer sobre este criterio. “Ahora dicen, que yo dije, que la comida paraguaya es fea, ¿yo cuando dije esto?, lo que sí dije es que para mi gusto, para mi paladar, le falta sal, le falta sazón, le falta aderezos, porque yo estoy acostumbrado a otro tipo de comida que yo he probado”, dijo.

El ciudadano cafetero culminó el vídeo pidiendo disculpas al pueblo paraguayo por sus comentarios sobre la comida local. “Si ofendí alguna persona paraguaya con todo lo que dije, no era mi intención ofender su país, con su gastronomía única y sus personas maravillosas”, manifestó. El audiovisual sumó más de 302.000 reproducciones y varias reacciones.

“Te fuman porque dijiste que la única comida rescatable de Paraguay era el lomito árabe y eso no es una comida típica del país”, “Te fuiste a probar nuestra comida en los lugares equivocados”, “Nuestra gastronomía no es para débiles”, “El problema es que no se expresa con delicadeza cuando no le gusta algo”, escribieron.

Fuente: La Nacion