Un joven de 17 años fue arrestado como principal sospechoso en el asesinato de Óscar Cantero Sosa, un comerciante requerido por tráfico internacional de estupefacientes.


El hecho estaría vinculado a casos de narcotráfico, por lo que toma cada vez más fuerzas de que se trató de un aparente ajuste de cuentas. 


Las autoridades han intensificado sus esfuerzos para esclarecer el caso, analizando más de 60 circuitos cerrados de vigilancia. Estos registros han sido cruciales para reconstruir los eventos que rodearon el asesinato y establecer la cronología de los hechos. Asimismo, se han recopilado testimonios de varios testigos que podrían arrojar luz sobre el contexto y las motivaciones detrás del homicidio.


El comisario Héctor Aguilar, de Investigaciones de Itapúa, destacó la importancia del trabajo en equipo entre diferentes cuerpos de seguridad y la profesionalización del personal involucrado. Además, señaló que se están identificando a posibles mandantes y cómplices, lo que podría ampliar la investigación hacia una red más amplia de delincuencia.


La detención del joven no solo está vinculada a este caso en particular; las autoridades no descartan que esté implicado en otros hechos de sicariato en la zona. Esto ha llevado a un enfoque más exhaustivo en la investigación, con la esperanza de desarticular posibles grupos criminales que operan en la región.