El proyecto, que ya funciona con éxito a nivel nacional, invita a voluntarios de cualquier profesión, no solo del sector salud, a sumarse a esta innovadora terapia que busca mejorar el estado de ánimo de los pacientes, especialmente de los niños.

Impulsado por médicos que utilizan la sonrisa como herramienta terapéutica, el programa se basa en la premisa de que la alegría puede ser un bálsamo frente a tratamientos difíciles. La Fundación Lazos del Sur y el nuevo hospital de Encarnación se perfilan como los escenarios ideales para implementar esta iniciativa, ofreciendo un respiro a los niños que enfrentan largos y dolorosos procedimientos, ayudándoles a olvidar por un momento las "paredes frías" del hospital y a recuperar la alegría.

Para que Paya Sonrisa llegue a la ciudad, se requiere un grupo mínimo de 20 voluntarios comprometidos a participar en esta campaña de humanización de la medicina. La invitación está abierta a todas las personas que deseen llevar sonrisas y un poco de luz a quienes más lo necesitan.