El terrible hecho habría ocurrido en noviembre del año pasado. Sin embargo, hasta el momento no hay ningún detenido.

El papá responsabiliza al hijo de 40 años de un pastor de la Iglesia Adventista del Séptimo Día. El mismo quedaba a cargo del niño cuando la madre se iba a trabajar.

El pequeño fue separado de sus padres, quienes ya no conviven juntos, porque hay una investigación abierta.

“Yo le retiré a mi hijo de la guardería el 11 de noviembre del año pasado (estaba al cuidado de la madre) y al llegar a casa yo me percato de que mi hijo estaba con molestias en sus partes íntimas”, detalló.

Inmediatamente el hombre fue hasta el hospital donde le confirmaron de que el niño tenía rastros de abuso.

Posterior a eso, fue a la comisaría a realizar la denuncia por supuesto abuso, porque aún no tenía el certificado médico a mano.

“Unos días antes fui a verle a mi hijo a la guardería y le encontré que estaba extraño, ido y ausente, entonces le comenté a la madre y ella me dijo que estoy viendo cosas”, apuntó.

Sospechoso

Luego descubrió que además de llevarlo a la guardería, la madre lo llevaba a la casa del pastor para que el hijo de este cuide al suyo.

Fue a la casa del religioso y notó que su hijo estaba incómodo.

El niño supuestamente le dijo que su “tío” le hizo daño, apodo con el cual llamaba al hijo del pastor. El papá alega que la madre y la gente de la iglesia sabía lo que estaba ocurriendo, pero guardaron el “silencio religioso”.

Fuente: EXTRA