Un trágico accidente ocurrió este viernes por la mañana en el barrio San Antonio Ypecuru, en Encarnación, cuando un niño de un año y nueve meses perdió la vida al caer en un pozo rústico ubicado detrás de la vivienda de su familia. El pozo, que cuenta con una tapa de madera, aparentemente se encontraba destapado en el momento del accidente, lo que permitió que el menor aprovechara un descuido de su madre y cayera en su interior.

Según la versión de la madre, ella se encontraba sentada frente a su vivienda y en cuestión de segundos, perdió de vista a su hijo. Fue entonces cuando observó con horror que su pequeño ya se encontraba sumergido en el agua del pozo, que tenía entre 25 a 27 metros de profundidad.

El hecho rápidamente alertó a los Bomberos Voluntarios Amarillos, quienes acudieron al lugar para realizar el rescate. A pesar de sus esfuerzos y de haber logrado sacar al niño del pozo, lamentablemente, los rescatistas no pudieron salvarle la vida.

El Suboficial Lorenzo González, jefe de la Comisaría 37 de la jurisdicción, manifestó que la tapa del pozo podría haber sido demasiado pesada para que un niño de esa edad la removiera, aunque la madre aseguró que se encontraba tapado el pozo. La tragedia deja una profunda tristeza en la comunidad, que lamenta la pérdida de un niño tan pequeño.