La Dra. Heidi Cáceres, especialista en Flebología y Linfología de la I Cátedra de Clínica Quirúrgica de la Facultad de Ciencias Médicas y del Hospital de Clínicas, comentó que generalmente se transmite de madre a hija y es más frecuente su aparición en mujeres por los embarazos, las hormonas, aparte de otros factores desencadenantes como la obesidad y el sedentarismo. Generalmente, en primavera y verano se hacen más evidentes, porque con el calor se dilatan, produciendo hinchazón o edema en las piernas.

Además, en dichas estaciones, la gente utiliza ropa que deja más visible las piernas, se prepara para ir de vacaciones y empieza a mirarse. Entonces, por más de que no haya dolor, se encuentra con las dilataciones venosas, las arañitas, las varices reticulares y quiere tratarse.

¿Cómo cuidarse?

La Dra. Heidi Cáceres dijo que se debe tener en cuenta el antecedente familiar, es decir si la madre, tías o algún familiar tiene varices hay probabilidades de que una también pueda desarrollar. Ante esto, lo ideal es cuidarse y para eso hay que estar atenta a las señales como que le duelen o le pesan las  piernas al final del día, tiene picazón y molestias.

Mencionó que el cuidado de los hábitos diarios es fundamental, como llevar una alimentación saludable, una dieta con fibras, hacer ejercicios del tipo aeróbico como caminata, trote, bicicleta, natación. Lo que no está recomendado es realizar pesas, porque acentúa mucho, y tampoco se debe estar demasiado tiempo sentada ni parada sino en continuo movimiento.

La consulta

Ante la visualización de varices o las primeras molestias, la especialista manifestó que se aconseja consultar para ver en qué etapa de la enfermedad está, para lo cual se deben hacer algunos estudios como el doppler que es el que más se utiliza para el diagnóstico. De acuerdo al grado de varices que tiene la paciente se indican algunos tratamientos, para empezar, se calma la molestia, el dolor, se aconseja el uso de medias compresoras, se insta al cuidado de la piel, porque el varicoso siempre tiene la piel seca.

Si una persona subió de peso la nutricionista le puede ayudar a volver a su peso anterior, lo cual produce un cierto alivio. Luego se ve que grado de varices tiene la paciente y en el caso de que las venas principales estén funcionando bien, solamente trabajan sobre las superficiales, para lo cual se tienen muchas opciones como ser esclerosis, láser, entre otros.

En cambio, si las venas principales, las superficiales y las safenas están enfermas se debe ver un tratamiento invasivo como la cirugía, láser y otras para lo cual el especialista evalúa cual es lo más conveniente. “Los tratamientos se deciden de acuerdo al grado de evolución de la enfermedad, al tipo de paciente que se tiene y a que tecnología se pude acceder”, reveló la Dra. Heidi Cáceres.

Un paciente que quiera consultar con algún especialista en Flebología se debe agendar a través del call center del Hospital de Clínicas,  para lo cual debe llamar a uno de los siguientes números: 021 -3399366, 021- 3399371, 021-3399367, 021- 3399368. Detalló que en la primera consulta se hace toda la historia clínica del paciente, todos sus antecedentes como si es hipertenso, diabético, si tiene antecedentes familiares y hasta si está planeado un embarazo, porque las varices se acentúan en ese momento.

La especialista dijo que hay mujeres que refieren que desde los 13 años, cuando empieza la adolescencia, comienzan a visualizar las varices, porque también está relacionado a los cambios hormonales.  Va creciendo la paciente y por lo general después del segundo embarazo empieza a acentuarse mucho más, por eso trabajan también con el ginecólogo para ver los métodos anticonceptivos que más le conviene para poder espaciar los embarazos y calcular el número de hijos quiere tener.

Puntualizó que las que tienen muchos hijos también pueden desarrollar varices pélvicas, que son de muy difícil tratamiento. Afirmó que existe un poco de controversia respecto a si los anticonceptivos hacen que las varices se acentúen, algunas pacientes dicen que sí y otras que no, aclarando que actualmente ya se fabrican las píldoras con menos concentración de estrógeno y progestágeno, pero sí dijo que podrían ser trombogénico en pacientes que tienen cierta predisposición.

Fuente: HOY