En los últimos años Paraguay se ha convertido en el país más avanzado en la producción de cannabis no psicoactivo o cáñamo industrial, como mejor se lo conoce, y ha logrado posicionarse como la tercera nación en ingresar al mercado europeo


Es por esto que el compromiso por parte de las autoridades y del propio sector privado ha crecido exponencialmente, logrando arrancar en 2020 con unos 6 departamentos a nivel país con el incentivo de su producción, para luego duplicarse y alcanzar en 2021 unos 11 departamentos en total.

La fábrica de procesado de cáñamo industrial de la firma Healthy Grains S.A. posee una moderna infraestructura con más de US$ 3 millones invertidos y se convierte en una de las más modernas de Sudamérica y pionera en el procesamiento del cáñamo industrial que acompaña al sector de cerca.

CRECIMIENTO
El presidente de la Cámara de Cáñamo Industrial del Paraguay, Marcelo Demp, explicó a nuestro medio que la última zafra de invierno del 2021 ha tenido un crecimiento sumamente exponencial del 500% en comparación con el período del 2020 y esto implica un esfuerzo y una participación mucho más activa de muchas empresas que pasan a formar parte del gremio y producir mayores variedades de productos derivados o con agregados de cáñamo, que estimulará en mayor medida el mercado.

“Hoy existen más de 18 mil puntos de ventas locales que están vendiendo y comercializando de manera nacional diferentes productos elaborados con cannabis no psicoactivo. Se han sumado muchas cadenas farmacéuticas, supermercadistas y cuidades mismas como Encarnación y otras zonas de frontera, además de ocho o nueve países como destinos de exportación, generando un importantísimo efecto multiplicador en el Paraguay”, especificó el representante del gremio.

PRODUCCIÓN
Si bien, según acotó Demp, el cultivo de cáñamo es mucho más resistente a los embates climatológicos y condiciones adversas del suelo, amén de poder procesarse dos veces al año, todavía es muy compleja la cuantificación de volumen de los productos derivados, entendiendo la variedad y flexibilidad que se obtiene a partir de la fibra principal en cada cosecha. Sin embargo, se maneja un área de cultivo que ronda las 1.700 hectáreas en la actualidad.

“Se va estar sembrando de vuelta a finales de marzo y abril en un promedio de 2.000 hectáreas; no se podría crecer aún mucho más porque nos encontramos también en proceso de registro de cultivares, parte de las exigencias de la Ley para poder seguir avanzando. ¿Cuánto significa en volumen esta área? Es muy difícil determinar todavía por la cantidad productos derivados, siendo que van desde las harinas, hasta las proteínas, aceites, nueces, y muchos otros que resultan de la planta”, detalló.

EXPORTACIÓN
Ya desde el 2021 iniciaron las exportaciones del cáñamo industrial a varios destinos del primer mundo, con la diferencia de que fueron productos a granel, enviados al Reino Unido, Holanda, Estados Unidos, Canadá y Australia. Desde diciembre, se empezaron a exportar productos terminados a Costa Rica, que a su vez redistribuirá esta producción a Guatemala, Panamá y México.

“A este hecho se suman dos empresas locales que han realizado alianzas estratégicas, y han decidido añadir la materia prima a productos ya elaborados, concretando por un lado, envíos a Estonia, donde van a redistribuirlos a Portugal, Holanda y España, mientras que por otro, una última exportación a Miami, Florida, completando en conjunto pedidos de prueba donde existe una intención de compra que podría ampliar el volumen a seis contenedores y esto traducirse en US$ 1,5 millones de ingreso de divisas para el país”, indicó de forma pormenorizada.

Finalmente, Demp aseveró que estas últimas exportaciones se realizaron por un valor promedio de US$ 200 mil, y miles de cajas de productos pertenecientes a todo tipo de categorías, que serán puestos a prueba al mismo tiempo en diversos mercados internacionales, abriendo un abanico de posibilidades y potenciales compradores para la industria nacional del cáñamo.

“Lo que queremos es potenciar la economía con algo alternativo, para generar un impacto socioeconómico sustentable donde el Paraguay logre posicionarse y dar un ejemplo al mundo, ya que en ninguna parte del globo se desarrolla el cannabis industrial con comunidades indígenas y familias campesinas como se hace en el país, y esto converge en un hito demasiado importante”, finalizó el profesional.

Fuente: 5 Dias