La estatua, obra del escultor concepcionero Orlando González, está emplazada en el acceso a la ciudad a través de la Ruta PY01, a metros del puente Mboika’ê.

El monumento está construido sobre una estructura única de hormigón armado de siete metros de alto, que corresponde a la estatua propiamente dicha, y a la base, de cuatro metros, con el que totaliza 11 metros de altura y ocho toneladas de peso.

La estatua representa al San Roque vestido con la túnica característica de los misioneros jesuitas y lleva una pintura especial color arena, para soportar el efecto de las inclemencias climáticas y el sol. 

La leyenda sobre el martirio del misionero San Roque González de Santa Cruz dice que luego de haber sido asesinado, su cuerpo fue quemado en una hoguera, pero el corazón de Roque no fue consumido por las llamas, seguía latiendo y habló a los nativos de lo mal que actuaron, por lo que fue atravesado con una flecha.

Del acto participaron autoridades municipales, representantes de la fundación donante de la escultura, invitados especiales y la ciudadanía que se acercó al lugar.

El punto se vuelve un atractivo turístico más de la capital itapuense, invitando a tomar fotografías al llegar a la capital del turismo paraguayo.