Niños y adolescentes de entre 12 y 16 años participaron de un evento nocturno con venta de alcohol y sesiones fotográficas en ropa interior. El caso ocurrió en la ciudad de Asunción, y es una moda que se trajo del extranjero. FacebookTwitterWhatsAppCompa


La Municipalidad de Asunción, a través de la Consejería por los Derechos del Niño, Niña y Adolescente (CODENI), junto con el Ministerio de la Niñez y la Adolescencia (MINNA) y la Policía Nacional, detectó la participación de menores de edad en una fiesta nocturna con venta de alcohol y actividades altamente inapropiadas para adolescentes. El evento, de nombre “Pijama Party”, se realizó en un local del barrio Bella Vista, conocido por organizar fiestas para adultos.


Durante el operativo, encabezado por la abogada Elba Ibarra Fleitas, se constató la presencia de niñas y adolescentes vestidas con pijamas, shorts y blusas, algunas de las cuales participaban en sesiones fotográficas en escenarios decorados con ositos de peluche, según detalló la representante de la CODENI.


La intervención se realizó entre la medianoche y la madrugada del sábado 19 de julio. A esa hora, menores de entre 12 y 16 años hacían fila para ingresar al establecimiento, que funcionaba como una discoteca, con música estridente, iluminación tenue y expendio de bebidas alcohólicas, condiciones no aptas ni legales para adolescentes.


Según el reporte dado en entrevista con Unicanal, no había adultos responsables acompañando a los menores y el evento fue difundido de manera cerrada a través de mensajes de WhatsApp, sin publicaciones abiertas en redes sociales. Esto hace presumir que se trataba de una “prueba piloto” de una modalidad de fiestas que ya se realizan en países como Argentina y Chile, con la intención de expandirse a Paraguay.


Desde CODENI, indicaron que se tomaron datos de los adolescentes presentes, los cuales están siendo procesados por la Policía Nacional para la identificación de responsables y posibles delitos conexos.


La representante Elba Ibarra alertó sobre el grave daño físico, psicológico y social que estas fiestas pueden generar en los adolescentes. “No era un ambiente saludable ni siquiera para adultos. Mucho menos para niños y niñas que estaban expuestos, sin control, y siendo fotografiados”, denunció.


Desde la Municipalidad y la CODENI advirtieron que se avanzará en la identificación de los responsables directos de promover esta modalidad de alto riesgo para la niñez y adolescencia.


El caso se encuentra bajo análisis legal, en cumplimiento del artículo 5° del Código de la Niñez y la Adolescencia, así como del artículo 226° del Código Penal Paraguayo, que establece penas para padres o tutores que incumplan el deber de cuidado. También se constató el incumplimiento de la Ordenanza Municipal N° 221/5, que prohíbe la presencia de menores en lugares donde se vende alcohol.



FUENTE: HOY