Samuel Portillo es protagonista de una increíble historia donde la vida y el fútbol le dio un giro inesperado.


El paraguayo Samuel Portillo, futbolista del Deportivo Riestra, es protagonista de una de las historias más increíbles y hermosas que nos regala la vida ligada al fútbol. 

Portillo es oriundo de la ciudad de Itauguá y en el 2016 cuando tenía 22 años viajó a Argentina en busca de un futuro mejor en donde trabajaría de albañil en Buenos Aires.

Samuel contó que tiene una habilidad impresionante que es su velocidad, esa característica le sirvió para que en uno de esos picados con amigos sea visto por otro amigo que lo llevó a probar en Villa San Carlos, equipo de la Primera B en 2019, donde quedó. Debutó, jugó un total de 21 partidos y anotó tres goles.

Su increíble velocidad despertó el interés del Deportivo Riestra que lo contrató en 2021 para la temporada en la primera B Nacional.

En 2023 fue su momento de gloria ya que disputó siete partidos con Riestra, logró ascender a la máxima categoría del fútbol argentino y el jueves estuvo en el banco de suplentes en el empate sin goles ante Instituto por la fecha 1 de la Liga Profesional de Argentina.

La vida le dio un giro inesperado después de viajar a Argentina para un trabajo totalmente diferente.

Samuel Portillo cuenta que no sabe de táctico porque nunca fue a una escuela de fútbol, pero si explota su velocidad jugando como punta tirado por las bandas. De hecho ganaba dinero jugando carrera en apuestas donde él mismo competía.

Fuente: D10