El Lic. Aldo Ponce, responsable de la Secretaría Municipal de Prevención y Tratamiento de Adicciones, advirtió sobre el preocupante aumento del consumo de estos dispositivos, especialmente entre jóvenes y adolescentes de la región.

La problemática se enmarca en un contexto nacional, tras la media sanción otorgada por la Cámara de Diputados al proyecto de ley que busca establecer medidas sanitarias para regular los dispositivos electrónicos de administración de nicotina, sistemas similares sin nicotina, así como otras formas emergentes de vapeo.

La normativa, que estuvo estancada durante varios meses y fue objeto de distintas propuestas, incluye una de las más contundentes: la prohibición total de estos productos, desde su importación y fabricación, hasta su venta y consumo.

Uno de los puntos centrales del proyecto es la equiparación de los vapeadores con los cigarrillos convencionales. Esto implicaría, entre otras medidas, la prohibición de venta a menores de edad, tanto en locales físicos como a través de plataformas digitales o servicios de entrega a domicilio.

Además, se establecerían nuevas exigencias sobre su exhibición en comercios. Los productos deberán ser retirados de las góndolas y sólo podrán venderse en puntos específicos, como cajas registradoras, fuera del alcance directo del consumidor. Asimismo, deberán incluir advertencias visibles sobre los daños que causan a la salud.

“La venta de productos de tabaco al público deberá realizarse exclusivamente en las cajas de pago o puntos de venta específicos de los establecimientos, de tal forma que estos no estén directamente accesibles al consumidor final”, detalla el texto legislativo.

Desde Encarnación, autoridades locales y sectores vinculados a la salud insisten en la urgencia de avanzar en la regulación, ante lo que consideran una nueva amenaza silenciosa para las nuevas generaciones.