En tiempos de divorcios y separaciones, pensar en algo así parece casi un milagro. Pero historias como estas existen, y bien pueden servirnos de modelo, de ejemplo.


Don Constancio Román Saucedo (96) y doña Julia Ortiz (89), viven en Capitán Miranda, Itapúa, y está celebrando sus 72 años de casados. «Para que una relación sea duradera no hay secretos, Dios tiene que ser el centro de todo», señala con firmeza el karai.


«Centramos nuestra relación en Él y todo se hace más llevadero. También, lógicamente, el diálogo entre ambos es importante, no discutir, sino dialogar», expresó ella.

Ambos tuvieron 18 nietos (4 ya fallecidos), unos 78 nietos, 48 bisnietos y un tataranieto. Los abuelitos romanticones aseguran que se quieren con el mismo amor que sintieron en aquellos tiempos de juventud y les encanta disfrutar de la adorable compañía de sus familiares quienes les brindan todo su afecto, gratitud y que, en las últimas horas, le realizaron una flor de fiesta para celebrar las 7 décadas juntos. 

La vida les cruzó por esas cuestiones de la vida. Él vivía en Cuatro Potrero, Encarnación, sitio que fue escogido por la familia de doña Julia para mudarse desde Caazapá. «Cuando nos conocimos, nos enamoramos, nos casamos y, desde aquel día fue un momento de respeto y lealtad entre ambos», dijo don Constancio. La pareja se dedicó a la agricultura y con esa noble labor sacó adelante a sus hijos. «Trabajamos en la chacra, ella conmigo siempre, a mi lado», señaló. 


Los abuelitos saben que son como una “especie de extinción” en esta época donde en la sociedad se puso de “moda” los divorcios y las separaciones. Es por eso que cada vez que tienen la oportunidad animan a los jóvenes a seguir creyendo en la fidelidad de los vínculos y, sobre todo, a querer construir un proyecto de vida que los haga felices en compañía de la persona amada.


Pareja ejemplar «Ellos son unos ejemplos para nosotros. Nunca discutieron frente a nosotros. Nos inculcaron siempre los buenos valores como el respeto, la honestidad y la responsabilidad», expresó doña Lucy, una de las hijas de esta hermosa pareja. «No todos tienen la posibilidad de cumplir 72 años juntos, es una bendición. En ellos siempre vimos el ejemplo de vida y aprendimos todo», añadió.


«Mi mamá siempre dice que el secreto es el tire y afloje, juntos, conversar, son una pareja muy espiritual. Se cuidan mutuamente», señaló. «Hasta hoy en día tienen sus plantaciones, son muy guapos», expresó. «Es bueno resaltar algo positivo entre tantas cosas malas que todos los días escuchamos», añadió.


Fuente: CRÓNICA