Murales, esculturas y obras que se convirtieron en patrimonio cultural de la ciudad.


Con más de cuatro décadas de trayectoria, Bartolomé Martínez se ha consolidado como una verdadera leyenda viva del arte en Encarnación. Sus manos han dado vida a murales, esculturas y distintas expresiones artísticas que hoy forman parte del paisaje urbano y cultural de la ciudad.


Martínez no es solo un creador, sino también un mentor que inspira a nuevas generaciones. A través de su ejemplo, busca mantener vivo el arte como una poderosa herramienta de expresión, motivando a jóvenes talentos a descubrir y seguir ese camino.


Las huellas de su trabajo están presentes en diferentes rincones de Encarnación, donde espacios cotidianos se transforman en auténticas galerías al aire libre. Cada mural y cada escultura cuentan historias que reflejan el alma de la comunidad y fortalecen la identidad local.


Su aporte trasciende lo estético: representa un legado cultural que promueve la creatividad, la pertenencia y el desarrollo social. La trayectoria de Bartolomé Martínez nos recuerda que el arte no solo embellece los espacios, sino que también construye memoria y une a la sociedad a través de la cultura.