El director del Centro de Salud advierte sobre la urgencia de enfrentar esta realidad como una responsabilidad colectiva.


La comunidad de Obligado se encuentra en estado de alerta ante el aumento sostenido de embarazos en niñas. Así lo reveló el Dr. José Kappeler, director del Centro de Salud local, durante un Taller de Planificación Participativa con Enfoque en Determinantes Sociales, en el marco de la estrategia “Municipio Saludable”.


Según el médico, actualmente se registran 15 casos de niñas embarazadas, con edades comprendidas entre los 13 y 17 años. “Hasta ayer teníamos 13 casos, y hoy ya se sumaron dos más”, informó, visiblemente preocupado por la rapidez con que crece esta cifra.


Lo más alarmante, según Kappeler, es que algunas de estas menores ya se encuentran en situación de concubinato, en varios casos con el consentimiento de los propios padres. “Esto representa no solo una grave vulneración de derechos, sino también un hecho punible conforme al Código Penal Paraguayo. Hay responsabilidades legales claras”, enfatizó.


El médico hizo un llamado enérgico a la comunidad: “No podemos normalizar esta situación. No podemos permitir que niñas que deberían estar en la escuela terminen en una sala de partos. Este es un problema que nos interpela a todos”.


El fenómeno del embarazo adolescente, especialmente en edades tan tempranas, refleja una profunda falta de educación sexual integral, naturalización de relaciones desiguales, desinformación y la débil presencia del Estado en contextos vulnerables.


La presentación de estos datos se realizó en el marco del Proyecto de Incentivo por Cumplimiento de Metas Sanitarias, que busca abordar las causas estructurales de los problemas de salud y crear entornos más seguros y saludables para la infancia y adolescencia.


Llamado urgente a la acción

El escenario exige una respuesta inmediata y articulada desde todos los sectores: familias, escuelas, centros de salud, autoridades judiciales y el propio Estado. El embarazo infantil no es una elección: es la consecuencia directa de la vulneración sistemática de derechos.


Garantizar un futuro libre, seguro y digno para las niñas debe ser una prioridad impostergable para toda la sociedad.