Un accidente laboral lo dejó sin nada, ya que hasta su familia lo abandonó.

 Ahora vive de la caridad de vecinos y amigos, y solo pide una ayuda solidaria para someterse a una cirugía para volver a trabajar. El hombre es de la ciudad de Zevallos Cué, es un electricista valé y trabajo no le faltaba, pero su vida cambió mientras trabajaba en una obra en Asunción. 

En un terrible descuido algo salió mal y sufrió una terrible descarga; estaba en el cuarto piso de una obra, de donde cayó y aparte de algunas quemaduras se fracturó la cadera. “Estoy en una situación crítica, me tengo que operar de la cadera en el Hospital de Trauma, necesito 24 millones para la compra de platino. 

La Diben me donó 11 millones y me faltan 13 millones que no sé de dónde voy a conseguir, porque estoy postrado en una cama y mi situación cada vez es más crítica, solo me queda apelar al gran corazón de los compatriotas para poder llegar a hacerme esa cirugía para no morir lentamente postrado en una cama”, dijo a Crónica don Feliciano con la voz quebrada.

 Sus vecinos lo cuidan como pueden ya que también son humildes, pero hace tiempo no puede acudir ni a las consultas porque se encuentra solo, su familia lo abandonó tras el accidente. “Su situación es muy difícil porque no le tiene a nadie, él trabajó en mi casa, es una persona muy honesta y me duele mucho lo que le pasó. 

Por eso al enterarme de su desgracia publiqué su historia en Twitter para ver si le llegaba al corazón a alguna persona pudiente, pero lastimosamente hasta el momento no recibimos ninguna ayuda”. contó a Crónica Diego Benítez, quien encabeza el pedido de ayuda para el señor. Diego contó que Feliciano se debe operar de urgencia porque no tiene movilidad de la cintura para abajo, y al no tener los cuidados necesarios se le forman heridas en la pierna y el pie, el cual está siendo limpiada solo con hojas de guayaba.

 “Es un pedido de ayudas a gritos, todo lo que se le pueda donar le será bienvenido ya que no tiene nada y vive en una condición de extrema pobreza” dijo.

 Si alguna persona de buen corazón tiene la posibilidad de ayudar al hombre, se puede comunicar al (0983) 160-086, toda ayuda es bienvenida para el prójimo que se encuentra postrado en una cama y abandonado a su suerte.

FUENTE: CRÓNICA