El mal clima que se vivió en la tarde del martes hizo que dos pescadores que se encontraban en el río Paraná debieran ser rescatados por personal de Prefectura.


Ambos resultaron ilesos pero su embarcación terminó hundiéndose. 


Alrededor de las 19.30 el primer alerta lo recibió la policía de parte de un amigo de los náufragos, quien avisó que frente a la toma de agua ubicada en el límite entre los municipios de Posadas y Garupá, dos personas estaban en peligro dado que la canoa se había volcado y hundido.

Las víctimas se encontraban aferradas a la segunda torre de la toma que se encuentra a varios metros de la costa. El hombre señaló que ambos se encontraban bien y como salvaron el celular pudieron comunicarse pero necesitaban que los rescataran dado que nadar en las condiciones en las que se encontraba el río era complicado. Además de la distancia que debían cubrir era muy riesgoso.

Efectivos de Prefectura se dirigieron al sitio a bordo de móviles, motos de agua y dos nadadores del equipo de rescate. Se trataba de un hombre de 43 años y su hijo de 18, ambos domiciliados en el barrio Ñu Porá de Garupá.

 

Los salvó el celular

Al momento del hecho, pudieron conservar un teléfono celular con el cual dieron aviso a un amigo que estaba en la costa y a su vez este llamó a la policía. De inmediato se dio intervención a PNA y la cosa no terminó en tragedia.



Fuente: PRIMERA EDICIÓN