El hecho ocurrió el martes por la tarde en el Barrio Motem (personal no docente), ubicado en inmediaciones de ruta 12 y Zapiola, cercano al Club de Educación de Posadas. Los maleantes, que actuaron a plena luz del día, fueron registrados por las cámaras de seguridad de vecinos de la zona.

Silvia Ciganda, la mamá de Santino, contó a PRIMERA EDICIÓN sobre las difíciles horas que les tocó vivir tras ser una víctima más de la ola de inseguridad que está azotando a la ciudad.

“Mis hijos están asustadísimos, Santino es el que más nos moviliza. Le escribió una cartita a Papá Noel pidiéndole que nos devuelvan nuestros ahorros y que vayan los ladrones a la cárcel, eso es lo que más nos entristece. Uno termina valorando que no nos hayan hecho nada, porque por diferencia de minutos no me encontré con los ladrones dentro de mi casa”, relató angustiada.

La madre de tres hijos, psicóloga de profesión y personal del Consejo General de Educación, rescató la solidaridad de los vecinos que desde un primer momento le brindaron las imágenes de las distintas cámaras de seguridad de la zona en las cuales pudo observar el modus operandi de los delincuentes.

“Cuando llegué a mi casa me encontré con todo el desastre, uno no sabe lo que puede pasar si los encuentra adentro. Nos robaron los ahorros de toda nuestra vida, los regalos de 15 años de mi hija, celulares, computadora y eso es lo que sabemos hasta ahora porque todavía estamos ordenando nuestra casa”, detalló.

Indicó que además dejaron a mano algunos electrodomésticos por lo tanto no descarta que fueron sorprendidos con su presencia al momento del robo, por lo cual decidieron huir con los artículos más pequeños. “Dejaron varias cosas acomodadas como para llevar, creo que llegué justo en ese momento, se ve por las cámaras de seguridad de los vecinos. Los dos ladrones estaban dentro y saltaron por el muro del costado que da a la calle, ya que mi casa queda en la esquina, y se escaparon en un automóvil Gol rojo que todo el mundo está buscando”, manifestó.

Apuntó que ya efectuaron la denuncia ante la Policía y que “realmente es una sensación de impotencia y de tristeza la que tengo”.

“Es muy triste, simplemente nos queda agradecer que no nos pasó nada y volver a comenzar de cero. Somos una familia trabajadora, no estamos todo el día en nuestra casa porque trabajamos, nuestros hijos tienen sus actividades, hacemos una vida normal, pero pasan estas cosas y en un minuto te roban todo, la verdad que no tenemos consuelo”, lamentó.

Asimismo, Silvia volvió a destacar el accionar de los vecinos quienes llamaron a la Policía y acudieron de forma inmediata para asistir a la familia.

“Más allá de que no podían hacer nada para aliviar nuestro dolor, con decir presente y estar acá, ya fue mucho. Nosotros hicimos todo, pusimos cámaras en las esquinas, carteles de vecinos alertas, no podemos hacer más que eso”, expresó. Agregó que en lo que va del mes se registraron cuatro robos en el barrio y muchos de ellos durante el día.

Fuente: PRIMERA EDICION