La señora Marilin Soledad Ramirez llegó ayer a nuestra redacción para compartir una preocupante situación que atraviesa su hijo, Faisal Javier Ramírez, de 23 años. Según ella, los agentes policiales lo persiguen sin motivo aparente.


Según relata la señora Ramirez, su hijo es interceptado por los agentes de la comisaría 40 cada vez que sale de casa. Alega que lo detienen, lo interrogan y lo acusan de cometer delitos sin tener pruebas en su contra.


Si bien la señora Ramirez reconoce que su hijo es consumidor de estupefacientes, insiste en que no es un delincuente y que será llevado nuevamente a un centro terapéutico para recibir tratamiento.


La señora Ramirez hace un llamado a los agentes policiales para que cesen con esta "persecución" y permitan que su hijo pueda llevar una vida tranquila y sin acusaciones infundadas.