Adela Colmán, madre del joven Cristian Yegros (29), denunció la pericia vivida junto con su hijo en el Hospital Regional de Caacupé, donde el paciente falleció por supuesta falta de maquinaria para ser tratado debidamente.


El 11 de diciembre, el joven Cristian Yegros fue llevado de urgencia al hospital de la Villa Serrana y tras 12 días de internación (de los cuales 10 estuvo en terapia intensiva) falleció por pancréatitis con necrosis en la páncreas.

“Él fue con mucho dolor de estomago, con la panza muy inflamada, y le empezaron a tratar contra el dolor. A la noche de su ingreso al hospital le hicieron una ecografía con una maquina chica donde no se veía bien lo que tenía. Los doctores le dijeron que observaron barro en la páncreas, y posibles piedras”, expuso su madre Adela.

Como el estudio no mostraba claramente el problema, la mujer tuvo que mandar hacer otro estudio en un privado. Con este resultado, los profesionales concluyeron que no había piedras pero sí presentaba su páncreas inflamado y el hígrado graso.

“Cualquiera que tenga dos dedos de frente se daría cuenta que tenia pancreatitis y más con los resultados de análisis de sangre que le hicieron. Pero había sido necesitaban hacerle una tomografía para estar cien por ciento seguros y ver con claridad el tratamiento a seguir. Pero ellos no me dijeron nada de eso. Ya al día siguiente cuando se agravó la situación nomás ya quisieron llevarle a dónde se hacía el otro estudio que requería, pero ya era tarde. Al tercer día, cuando empezó a faltarle el aire y tuvo taquicardia, decidieron colocarle una vía central para suministrarle medicamentos más invasivos, para meterle en terapia intensiva. Allí recién pensaron que necesitaba la tomografía y quisieron llevarle a Paraguarí para dicho estudio, pero como ya no iba a soportar el viaje, le metieron directamente a terapia”, relató.

El paciente estuvo en terapia 10 días y en ese lapso comenzó a tener fiebre y su infección se expandió.

Su madre lamentó que lo mantuvieron internado sin realizarle todos los estudios necesarios para operarlo y salvarle la vida. “Tal ves si lo derivaban a tiempo en otro hospital con estudios de tomografía iban a ver su problema y le iban a operar para sacar la parte afectada. Tal ves se hubiera salvado. Ahora ya no nunca sabremos”, agregó.

La mujer aclaró que si bien hay muy buenos profesionales, estos nada pueden hacer sin el equipamiento necesario.

“Ojalá que nunca le ocurra lo mismo a otra persona porque es muy doloroso perder a un hijo por negligencia. Mi hijo estaba lleno de vida y tuvo que terminar así”, indicó además.

Por otro lado, como si no fuera poco esa lamentable situación, la denunciante sostuvo que a los 8 días del deceso de su hijo, otro de sus hijos sufrió un accidente en moto y lo llevaron al hospital de Caacupé, donde le hicieron radiografía y le indicaron que no se había roto ningún hueso. Sin embargo, la mujer decidió trasladarlo al Hospital de Trauma, donde los médicos descubrieron con los estudios que tenía la clavícula y una costilla rotas.


Fuente: HOY