Víctima cuestiona al juez Miguel Oscar López por no aplicar medidas cautelares



Un profundo sentimiento de indignación y desamparo se ha apoderado de Fernando Ávalos, víctima del hurto de su motocicleta en pleno centro de Encarnación. La frustración surge luego de que el autor confeso del delito fuera liberado sin que se le aplicara ninguna medida cautelar, decisión tomada por el juez penal de Garantías N° 2, Miguel Oscar López, a pesar de la existencia de pruebas que lo vinculan directamente al hecho.


El hurto ocurrió en una zona considerada de mayor vigilancia. La motocicleta de Ávalos, herramienta fundamental para su trabajo, fue sustraída y, aunque el presunto implicado fue aprehendido y —según el afectado— confesó el crimen, la resolución judicial permitió que continuara en libertad.


“Siento una tremenda impotencia. El autor confesó y las pruebas eran claras, pero lo dejaron libre sin ninguna medida. Que esto pase en el centro de Encarnación y que el responsable quede impune es inaceptable”, expresó el afectado, visiblemente consternado.


Además de la molestia por la liberación del sospechoso, Ávalos asegura que no recuperó su motocicleta y no existe ninguna disposición para resarcir el daño económico generado. Afirma que la pérdida afecta directamente su sustento laboral.


“Perdí mi herramienta de trabajo. Esto demuestra que no existe justicia para las personas que nos esforzamos y trabajamos. La ley parece proteger a los delincuentes”, sentenció, solicitando mayor responsabilidad en las decisiones judiciales relacionadas con el patrimonio ciudadano.


El caso generó un fuerte debate en la comunidad sobre la seguridad en el microcentro y la eficacia de las respuestas judiciales, especialmente en delitos que afectan a trabajadores que dependen del día a día para sostener a sus familias.