El encargado de despacho de la institución, Aníbal Laureano De Méo Britez, denunció el robo a las autoridades, informando que fue alertado por vecinos del lugar a las 08:00 horas. Al llegar al lugar, encontró la puerta de una aula violentada y descubrió que faltaban 60 litros de leche en cartón y 100 paquetes de galletitas.

Según el denunciante, ingresó al interior del edificio y encontró la puerta violentada. La policía se hizo presente en el lugar y se inició un procedimiento para determinar los responsables del delito. Además, se comunicó con el Ministerio Público para seguir adelante con la investigación.

La escuela está ubicada en el Barrio Santa Cruz de Encarnación y el hecho generó preocupación entre los padres y estudiantes de la institución.