La senadora informó, a través de su equipo de comunicación, que se encuentra en buen estado de salud en el tercer día de huelga de hambre que lleva a cabo en su despacho en el Congreso Nacional, contra el plan de enmienda constitucional.


La encuentrista Kattya González, a través de un comunicado, anunció que se encuentra de “buen ánimo” y “fuerte” en el tercer día de huelga de hambre que inició el último sábado, a las 13:00, como medida de fuerza contra un proyecto del presidente Santiago Peña para modificar la Constitución Nacional y establecer que el 100% del impuesto inmobiliario quede para las municipalidades.

Para la senadora, la verdadera intención del proyecto es introducir la reelección presidencial, como ya se había dado en épocas anteriores, por lo que decidió realizar la medida de fuerza que levantará si el gobierno de Santiago Peña realiza una declaración escrita donde renuncia formalmente a cualquier iniciativa de enmienda o reforma constitucional.

En la tarde de este lunes, la legisladora recibirá la visita del ex senador Jorge Querey, quien evaluará su estado de salud en su rol de médico.

Tras el fracaso del proyecto de Peña, de despojar a los intendentes de los recursos del Fondo Nacional de Inversión Pública y Desarrollo (Fonacide), no solo cedió ante los jefes comunales, sino que también les prometió que trabajaría para que el 100% de los impuestos inmobiliarios queden en los gobiernos municipales.

En tanto, esto implica modificar la Constitución Nacional, que en su artículo 169 señala que solo les corresponde el 70%, mientras que el 15% debe ir a las gobernaciones correspondientes y el resto, a las municipalidades con menos fondos.

Solidaridad

El Partido Encuentro Nacional expresó su solidaridad con la senadora González ante la medida extrema que decidió tomar y afirmó que la legisladora es víctima de “violencia política y de género, principalmente en las redes sociales”.

En un comunicado, la nucleación política también manifestó su rechazo ante un eventual intento de pedido de pérdida de investidura para la senadora por supuesto tráfico de influencias.

Exigieron, además, al presidente de la Cámara de Senadores, Silvio Beto Ovelar, que tome las medidas para salvaguardar la integridad y la seguridad de la legisladora mientras dure la medida de fuerza.

Fuente: UH