Ante el extremo calor que azota la región, aumentaron las atenciones por descompensaciones y personas que sufren infartos.


El cardiólogo Dr. Mario Centurión, alertó que por las altas temperaturas aumentaron estos tipos de atenciones, por lo que brindó recomendaciones a la ciudadanía para evitar el golpe de calor.


Centurión insiste en una buena hidratación y vestimentas claras, además, es importante la diuresis. Los que tienen más de 70 kilos, deben tomar dos a tres litros de agua al día.

A pesar de que existen ciertos grupos de riesgo, nadie está libre de sufrir problemas por el calor. Es evidente que aquellas personas que sufren enfermedades debilitantes (por ejemplo, las lesiones cardiacas) resisten peor el ataque térmico. Cuando hace mucho calor, el corazón debe realizar un esfuerzo adicional.

A los primeros síntomas de mareo y desvanecimiento se recomienda acostar a la persona afectada en un lugar fresco, bajo techo. 

En casos no muy graves, y si el paciente está dispuesto, pueden proporcionársele bebidas que favorezcan la rehidratación, como agua fresca, agua saborizada o té fresco. No se deben dar líquidos calientes para hidratar. 

El golpe de calor debe ser tratado inmediatamente, porque puede provocar la muerte del paciente. 

Debe bajarse la temperatura corporal con paños fríos o bolsas de hielo sobre la cabeza, o llevar a la persona en un ambiente fresco con aire acondicionado o bajo sombra para quitarle la ropa pesada, mojarle la cara y luego todo el cuerpo, si es posible con agua helada. Debe mantenerse fresca y mojada a la persona hasta que su temperatura corporal regrese a la normalidad. 

El médico resaltó que los grupos más vulnerables al calor son los niños, además de los adultos mayores