Arnold Ezequiel Rivas Gutter, residente del departamento de San Pedro, se encontró víctima de un robo en el Barrio Sagrada Familia de Encarnación mientras exploraba la ciudad en compañía de un desconocido que se ofreció a ser su guía.


En las primeras horas del pasado domingo, un incidente insólito tuvo lugar en el Barrio Sagrada Familia de Encarnación. Arnold Ezequiel Rivas Gutter, residente del departamento de San Pedro, se encontraba de visita en la ciudad cuando conoció a un individuo que se ofreció a mostrarle los encantos locales.

La situación tomó un giro inesperado cuando, en un momento dado, Rivas Gutter decidió detenerse para ir al baño. Aprovechando este instante de distracción, su acompañante desapareció con su automóvil, un Toyota Allion del año 2008.

Horas más tarde, el vehículo fue encontrado abandonado en la Avenida Japón de la misma ciudad, dejando a su propietario atónito y sin poder proporcionar detalles significativos sobre el individuo que le había acompañado, ni siquiera recordaba cómo iba vestido en ese momento.

Este suceso pone de relieve la importancia de no confiar ciegamente en desconocidos, especialmente en entornos desconocidos o durante la noche. La falta de precaución puede llevar a situaciones desafortunadas como la experimentada por Rivas Gutter, quien pagó el precio de su exceso de confianza con la pérdida de su vehículo.

Las autoridades locales están investigando el caso y exhortan a la población a ser cautelosa al relacionarse con personas desconocidas, así como a tomar medidas de seguridad adicionales al momento de desplazarse en lugares poco familiares. En un mundo donde la confianza puede ser un bien escaso, la prudencia y la vigilancia son virtudes invaluables para protegerse a uno mismo y a los bienes propios.