Tras meses de especulaciones, finalmente, el multimillonario estadounidense Elon Musk dijo que cancelará la compra de Twitter; acusó a la empresa de no proporcionar toda la información que pidió.


Luego de varios meses de especulaciones, este viernes trascendió que el hombre más rico del mundo, Elon Musk, no comprará la red social Twitter, por la cual estaba dispuesto a pagar unos 44 mil millones de dólares.

Según medios internacionales, el abogado del empresario envió una carta en la que anuncia que rescindirá el contrato millonario con la compañía, cuyas acciones cayeron hasta un 6% en los movimientos después del cierre.

En la carta, presentada ante la Comisión de Bolsa y Valores (SEC, por sus siglas en inglés) por el abogado Mike Ringler, se anuncia que la decisión se da por el incumplimiento sustancial de varias disposiciones del acuerdo, entre ellos, un pedido de información hecho por Musk a la compañía.

Ringler señaló que Twitter no proporcionó al magnate la información comercial relevante que solicitó: “Twitter ha fallado o se ha negado a proporcionar esta información. En varias ocasiones, Twitter ignoró los pedidos de Musk; algunas veces, las rechazó por razones injustificadas y, otras, afirmó que las cumplía mientras le daba a Musk información incompleta o inutilizable”, señaló el abogado.

“Por la presente, el señor Musk ejerce (el) derecho a rescindir el Acuerdo de Fusión y abandonar la transacción”, expresa la carta Comisión de Bolsa y Valores.

Musk ya había manifestado anteriormente sus dudas e incluso insinuó que podría abandonar el acuerdo ante la preocupación que le producía la gran cantidad de cuentas falsas.

En esa línea, el jueves, Twitter informó que elimina un millón de cuentas de spam por día durante una llamada con ejecutivos en una sesión que tenía como objetivo informar sobre el tema que la enfrentaba con Musk.

Los directivos de Twitter manifestaron en la llamada que las cuentas de spam representan menos del 5% de su base de usuarios activos cada trimestre. 

Además, señalaron que, para calcular cuántas cuentas son spam malicioso, revisa “miles de cuentas” muestreadas al azar, usando datos públicos y privados como direcciones IP, números de teléfono, geolocalización y cómo se comporta la cuenta cuando está activa, a fin de determinar si una cuenta es real.

Fuente: Infobae-Clarín