Los donantes de órganos y tejidos dan oportunidad de mejorar la calidad de vida de los pacientes en lista de espera.
- 12/09/2024
- Por Edicion Prensa
Hoy celebramos el Día Nacional del Donante en Paraguay, un día de reconocimiento y gratitud hacia aquellos que, con su valiosa donación de órganos y tejidos, hacen posible que otros tengan una segunda oportunidad de vida.
Cada donante es un héroe silencioso, un faro de esperanza en tiempos difíciles. La generosidad salva vidas y construye un futuro más brillante para nuestra comunidad.
El 12 de setiembre se recuerda el Día Nacional del Donante de Órganos y Tejidos, en el marco del aniversario del fallecimiento del Dr. Marco Aurelio Aguayo Rodríguez, primer donante cadavérico en el Paraguay, médico de nacionalidad paraguaya, de quien se realizó la ablación de los riñones y las corneas.
La fecha fue establecida por el Congreso Nacional, tras la promulgación de la Ley N° 5.602/16 que busca promover la donación voluntaria de órganos y tejidos anatómicos humanos con fines de trasplante.
Desde el Ministerio de Salud Pública, a través del Instituto Nacional de Ablación y Trasplante (INAT), se destaca la importancia de ser donante ya que sin estos no hay trasplantes ni oportunidad de mejorar la calidad de vida de los pacientes en lista de espera.
Toda persona viva o después de su fallecimiento por muerte encefálica, sin importar la edad ni el sexo, puede ser donante de órganos y tejidos, en el caso de menores de 18 años, con expresa autorización de los padres o tutores legales.
Ser donante posibilita que, dadas las condiciones clínicas necesarias, se pueda realizar la ablación y posterior trasplante de dos riñones, hígado, corazón, dos pulmones y el páncreas. En cuanto a los tejidos, se pueden ceder las dos córneas, la piel y los huesos.
En vida se puede donar un riñón, una parte del hígado, como también la médula ósea, siempre que estén emparentados. Las mujeres que dan a luz en partos programados también pueden donar placenta, que es utilizada en pacientes que sufrieron quemaduras.
El donante puede ser un individuo fallecido en muerte encefálica. Los órganos que se van a trasplantar se mantienen vivos hasta el trasplante mediante técnicas de ventilación artificial y drogas específicas para ello, que permiten que el corazón siga latiendo e irrigando los órganos a ser trasplantados.
La donación de órganos es un acto de generosidad y altruismo, un regalo de vida para las personas en lista de espera de un trasplante.
En el país, según la "Ley Anita" 6170/18, toda persona mayor de 18 años es considerada donante de órganos posterior a su fallecimiento. Si alguien no desea donar, debe manifestarlo por escrito al INAT.
La persona interesada en ser donante puede expresar su deseo de serlo registrando sus datos en el formulario habilitado vía web del INAT, en el siguiente enlace https://inat.mspbs.gov.py/