FOTO: REFERENCIAL, ARCHIVO

El mismo guiaba el colectivo de la Empresa Stella Maris hasta que al llegar al Barrio Santa María Mburika de Cambyreta, un hombre le hizo la señal de pare, abordó el bus y allí reveló sus verdaderas intenciones. 

Desenfundó un arma blanca con el cual intimó al trabajador y le exigió que entregue la recaudación del día. 

No tuvo otra opción que entregar la suma de 1.800.000 guaraníes, y su aparato celular. Tras lograr su cometido ya lo esperaba su cómplice a bordo de una motocicleta con el cual se dieron a la fuga. 

La denuncia fue realizada en la comisaría número 101 del mismo distrito y ahora van tras las pistas de los marginales.