La actividad marcó el cierre de un proceso de aprendizaje que brindó a los participantes las herramientas necesarias para emprender en el rubro gastronómico y mejorar su calidad de vida.

El evento contó con la presencia de autoridades municipales, instructores y familiares de los egresados, quienes celebraron con orgullo los logros alcanzados. Durante el acto, se destacó el esfuerzo y dedicación de los alumnos, muchos de los cuales ven en la capacitación una oportunidad concreta para generar ingresos y desarrollar sus propios emprendimientos.

Los cursos ofrecidos por el Centro de Participación San Isidro tienen como principal objetivo la formación en oficios, fomentando la inserción laboral y el autoempleo. A lo largo del semestre, los participantes adquirieron conocimientos teóricos y prácticos en la elaboración de productos de panadería y repostería, abarcando desde técnicas básicas hasta recetas de mayor complejidad.

La clausura no solo representó el final de un ciclo académico, sino también el inicio de nuevas oportunidades para los egresados, quienes ahora cuentan con herramientas para integrarse al mercado laboral o iniciar sus propios negocios.

Desde la administración del Centro, anunciaron que seguirán apostando a la capacitación como un eje fundamental para el desarrollo de la comunidad.